¿Estás estresando a tus jugadoras?
En voleibol no hay empates, con lo cual la tensión sube cada vez que nos aproximamos al final de un set muy luchado, mientras que en el fútbol, por ejemplo, puede que un empate venga bien a ambos equipos, y estos dejan los últimos minutos mas para un juego al no hacerse daño que a una batalla.
En nuestro deporte sabemos que no hay espacio para la diplomacia, ni para pensar en cómo debe quedar un set o un partido. Solo hay sitio para la acción!
Pero, para que la acción entre en juego, una serie de factores deben jugar también, y entre ellos está la lucidez, el miedo, el estrés, la fatiga, la energía….y así podríamos seguir durante un rato.
Podemos tener equipos que comienzan muy bien los sets, pero luego comienzan a venirse abajo si las adversarias les meten 4/5 puntos seguidos.
Incluso equipos que juegan muy bien hasta el punto 21 o 22, entrando en una fase de bloqueo mental que les impide cerrar el set.
Pero: ¿Cómo hago para que mi equipo juegue sin miedo ni estrés hasta el de los partidos?"
Esta pregunta no se puede responder si no tenemos en cuenta que en un equipo, las relaciones entre jugadoras y entrenadores son muy importantes. Prueba a pensar y a dar tu mismo una respuesta a esta preguntas, y después responde a esta:
"¿Cuál es tu contribución al problema?"
Puede que tengas cierta dificultad a la hora de responder, porque te falta la aportación de la otra parte, o sea de las jugadoras.
Justo el otro día mis jugadoras me dijeron que porqué no podía ir a entrenarlas los viernes, tercer día de entreno, ya que la entrenadora que me sustituye no les gusta por cómo les entrena y por cómo se porta con ellas.
Efectivamente, durante un par de meses, estaré ocupado los viernes, con lo cual el club ha encontrado una sustituta que pueda gestionar los entrenamientos. Yo acepté la elección, al ser una jugadora y entrenadora del club con experiencia, pero olvidaba contar con la opinión de las jugadoras.
Al recibir estos comentarios de mis atletas, me he planteado pedirles que respondan a preguntas específicas sobre el tema de la relación entrenador/jugador.
He preparado unos post it y les he pedido que, de forma anónima, respondieran con toda sinceridad. Algún ejemplo:
¿Que piensas cuando el entrenador se levanta del banquillo y empieza a andar cerca de la línea lateral?
A esta pregunta, muchos entrenadores responderán que a sus jugadoras les encanta, que sirve para animarlas y les dá energías. Sin embargo, por sorpresa, la mayoría de las jugadoras respondieron que sienten cierta presión y creen que el entrenador lo hace porque no confía en ellas.
¿Que piensas cuando el entrenador no te mira cuando mira hacia el banquillo para buscar una sustituta?
Aquí muchas veces un entrenador ni se percata de lo que ocurre. Otros dirán que es algo que suele pasar y entra dentro de las difíciles elecciones de un entrenador. Sin embargo las jugadoras se sienten ninguneadas, e incluso una explicación breve les vendría genial para sentirse parte del equipo.
¿Porque las jugadoras no se acercan al entrenador cuando salen del campo y tiran hacia la zona para las suplentes?
Los entrenadores contestaremos que en general se van a la zona de suplentes porque no hay nada de lo que hablar, por qué es lo normal o porque ahí están sus amigas. Ellas contestan que temen que el entrenador les diga algo negativo sobre su prestación, incluso sabiendo lo que están haciendo mal.
Cómo ves, una solución posible a un problema que ocurre durante el partido pasa por una mejora significativa en la forma de relacionarte con tus jugadoras.
El lenguaje verbal es importante, pero el lenguaje corporal es determinante en voleibol.
Trata de andar lo menos posible por la línea lateral mirando al cielo o al vacío, cómo preguntando a Dios por qué estás ahí en este momento. Cuida los movimientos y acércate más que nada para hablar con la colocadora, si fuera necesario.
En cuanto a las correcciones cuando sale una jugadora, mirala a los ojos y dale un feedback positivo antes de indicarle donde debe mejorar y que puede hacer para mejorar. Si no hay nada que decir, choca el 5 y listo. No hace falta decir que ha hecho una mierda de saque o que no se remata a la red.
Cuando tienes una jugadora que no suele jugar o juega muy poco, acércate a ella y explicale que aún no llegó su momento, pero que cuando llegue tendrá mucho más protagonismo. Si no es así, se sincero y dile que en este partido va a ser complicado que juegue.
Se valiente y honesto con tus jugadoras. Puede ser duro al principio pero a largo plazo te lo agradecerán y los resultados llegarán.
Debes abrirte a los cambios, de hecho, si quieres mejorar y si estás en mi blog es porqué quieres cambiar algo de ti y de tu equipo.
No importa cuánto éxito hayas tenido o tendrás, el éxito continuo depende de aceptar comentarios y trabajar para mejorar, tal como les pides a tus jugadores.
Victorias, derrotas, temporadas y trofeos van y vienen. El aprendizaje es constante.
Es todo para hoy,
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